Julio Baptista es de esos jugadores al que es muy difícil encontrarle enemigos. Probablemente desde su entrevista con Joaquín hace varios años en la que quedó bautizado como ‘Hulio‘ por el jugador gaditano. El brasileño se retiró hace poco más de un año del fútbol profesional tras pasar por varios equipos españoles, y actualmente dirige en las categorías inferiores del Valladolid.
Sin embargo, a una carrera en grandes clubes como Sevilla, Real Madrid o Arsenal, le precede un comienzo difícil en su Brasil natal, donde su madre, jugó un papel fundamental para encaminarle y que no se perdiese entre las malas influencias.
«Mi madre me ha dado todo. Trabajaba mucho y yo crecí con mis abuelos porque se separó de mi padre, yo no le conozco, y la verdad es que ha sido madre y padre. Todo lo que soy y en lo que me he convertido como hombre se lo debo a ella», reconoció en una entrevista para El Español.